¿Obligación de asegurar el patinete eléctrico o híbrido?
A lo largo de estos últimos años el uso del patinete eléctrico ha experimentado un boom verdaderamente sorprendente, sobre todo, en casi todas las grandes ciudades de nuestro país.
Lo que surgió para ser utilizado como un juguete para niños, se ha transformado tanto que, hoy por hoy, es un medio de transporte unipersonal muy utilizado.
Aunque han salido al mercado muchos modelos, el modelo estándar quizás sea uno de los preferidos por su versatilidad, por ser compacto, plegable y ocupar poco espacio allá donde decidas llevarlo.
Veamos los modelos que existen:
Patinetes tradicionales; fueron los primeros patinetes que salieron al mercado, fabricados de manera artesanal, con ruedas de goma que permitían el desplazamiento cuya impulsión era dada por el propio usuario mediante uno de sus pies. (ver patinetes)
Patinetes plegables; con la misma estructura que los tradicionales, pero construidos en aluminio al que se le incluyen unas ruedas de material sintético, más resistentes.
Permiten ser plegados para que no ocupen tanto espacio, así lo podemos llevar en cualquier medio de transporte público y lo podemos colocar fácilmente allá donde vayamos, universidad, oficina… (ver patinetes)
Patinetes deportivos; como todo, la elaboración de patinetes, ha ido más allá, con diseños más conseguidos y materiales más apropiados para hacer acrobacias conocidas como FREESTYLE. (ver patinetes)
Patinetes eléctricos; la tecnología ha conseguido dotar al patinete de un motor eléctrico, suspensiones delantera y trasera para la amortiguación y la absorción de baches y demás deficiencias del terreno.
Pueden utilizar ruedas de 4 a 10″ de diámetro para ciudad o excursiones al campo y además, si están homologados según la CEE, pueden llevar luces delanteras y traseras, espejos retrovisores, tacómetro, etc. (ver patinetes)
Por el momento no existe ninguna regulación uniforme que establezca su uso, por eso lo podemos ver tanto por carril bus, como vías peatonales o incluso vías urbanas más apartadas.
No obstante, debido al creciente número de incidentes, ciudades como Madrid ya han aprobado ordenanzas municipales para regular su uso.
De hecho, un reciente informa de la fundación Línea Directa Aseguradora, augura que en 2019 el número de muertos por accidentes donde estén implicados usuarios con patinetes, se multiplicará por tres. Teniendo en cuenta que en 2018 fallecieron 5 personas en accidentes de este tipo, y que hubo más de 273 accidentes, según los datos de la Fiscalía de Seguridad Vial; parece que más pronto que tarde vamos a tener una regulación a nivel nacional.
De hecho la DGT ya está preparando un primer borrador donde prohibirá la circulación de patinetes eléctricos por carretera, y limitará su velocidad a 25 km/h. Será necesario su correspondiente autorización administrativa para poder manejarlo y tendrá que tener seguro.
Este nicho de mercado, ya está siendo explotado por las primeras compañías que aseguran específicamente la responsabilidad civil como usuario de patinetes, ya que, hasta hace poco, tan sólo podíamos encontrar en el mercado productos que cubrían los daños derivados de su utilización relacionados con la responsabilidad civil en el ámbito privado.
En Catalana Occidente también nos ofrecen un tipo de seguro específico por unos 25 €, en el que podemos asegurar, la responsabilidad civil de 60.000 €/año y la protección jurídica.
AXA nos da las mismas coberturas que Catalana Occidente, pero nos aumenta la suma asegurada por siniestro hasta los 150.000 y nos reduce el precio hasta llevarlo a los 21 €.
Sólo en el producto de SeguraBiciPlus podemos contratar otras garantías, además de la responsabilidad civil que en este caso se limita a 150.000 € como suma asegurada, la protección jurídica, la asistencia en viaje (incluido pinchazos) el robo o un todo riesgo, y todo por 25 €.
Este nuevo producto, no sólo promete una guerra de precios, sino lo más importante; que el usuario pueda elegir diferentes opciones de aseguramiento a unos precios muy, muy ajustados.
